Un nuevo informe del Johns Hopkins Institute for Education Policy y UnidosUS reveló que la mayoría de los eventos históricos importantes que impactaron a los latinos en los Estados Unidos no están incluidos en los libros didácticos de historia de la escuela secundaria. El estudio encontró que el 87% de los principales temas latinos no se mencionan en los libros o se mencionan en solo cinco oraciones o menos.

Esto significa que muchos aspectos cruciales de la historia de América Latina, como la Guerra México-Estadounidense, la Guerra Hispano-Estadounidense, la adquisición de Puerto Rico por parte de los Estados Unidos, el Canal de Panamá, el movimiento moderno por los derechos civiles e importantes desarrollos legales, quedan fuera de los materiales educativos. La investigación analizó cinco libros de texto de historia de EE. UU. utilizados en siete estados y un libro de texto de historia de EE. UU. del programa de Nivel Avanzado (AP), examinando la profundidad del contenido, el equilibrio entre las discusiones sobre la desigualdad y las contribuciones latinas, el uso del lenguaje y la autenticidad de las imágenes.

Los investigadores encontraron que la cobertura de los eventos latinoamericanos desde el principio hasta el presente fue la más limitada, con una puntuación de solo 0,1 de un máximo de tres. El nombramiento de Sonia Sotomayor como la primera jueza latina de la Corte Suprema fue el único evento en los últimos 200 años mencionado en todos los libros como un momento latino fundamental.

El informe emitió recomendaciones, incluida la necesidad de desarrollar libros de texto que aborden completamente las experiencias latinas, incorporando contenido riguroso y fuentes primarias y secundarias. Además, instó a los maestros, padres y líderes comunitarios a abogar por planes de estudios más inclusivos y a comprometerse con los funcionarios y las juntas escolares para promover el cambio.

La inclusión adecuada de la experiencia latina en la educación se considera esencial para crear una sociedad que valore las contribuciones y experiencias de todos los estadounidenses, especialmente la minoría racial/étnica más grande del país. La apreciación precisa de la historia latina en el salón de clases se considera un paso crucial para garantizar que los jóvenes crezcan en una sociedad que reconoce y valora las contribuciones de las personas de color.