Un nuevo informe de “The Conversation” contempla la subrepresentación de los latinos en puestos políticos y de liderazgo en Estados Unidos. El estudio, dirigido por Justin de Benedictis-Kessner, profesor asistente de Políticas Públicas en Harvard Kennedy School, analizó datos electorales de ciudades, condados y distritos escolares durante las últimas tres décadas en centros urbanos medianos y grandes.

Los resultados indican una persistente sobrerrepresentación de los blancos en puestos políticos en comparación con la población general. En cargos municipales como alcalde y concejal, la discrepancia es notable, con el porcentaje de funcionarios electos blancos consistentemente superior al porcentaje blanco de la población desde la década de 1990. La representación latina en estos puestos es particularmente baja, lo que refleja una representación insuficiente significativa.

También se analizaron ejecutivos, legisladores, alguaciles y fiscales del condado y se encontró que la sobrerrepresentación de blancos persiste en todas estas categorías. Los latinos están subrepresentados en puestos como ejecutivos de condado, legisladores, alguaciles y fiscales. La representación en las juntas escolares también muestra una disparidad, aunque menos drástica que en otras áreas del gobierno.

También se destaca la importancia de la representación latina en puestos de toma de decisiones, señalando que los funcionarios electos locales desempeñan un papel importante en el gobierno de las vidas de millones de residentes, y la falta de representación latina en las esferas del gobierno local no pinta un panorama optimista sobre representación en el gobierno local.

El informe también muestra la persistencia de esta subrepresentación en otros ámbitos de la sociedad, como el Congreso, donde sólo el 9,7% de los miembros son latinos, y en el entorno empresarial, donde, a pesar del aumento de la fuerza laboral latina, la proporción de ejecutivos latinos se mantiene desproporcionadamente baja. El estudio sugiere que si la tendencia continúa, la brecha de representación podría aumentar al 650% para 2050.