El escenario político del sur de Texas, históricamente un bastión de los demócratas, es escenario de intensas disputas por la conquista del electorado latino.

Parte de este electorado se ha acercado a los republicanos, como ilustra el informe de NBC News. “El maestro de ciencias Jorge Jasso está orgulloso de sus raíces mexicanas. “Soy un estadounidense primero” que quiere ver a los funcionarios electos anteponer las necesidades de la gente de este país a las de los inmigrantes”.

La votación anticipada para las elecciones del 8 de noviembre comenzó el lunes (24 de octubre) en Texas, donde los latinos ahora superan en número a los blancos.

Debido a la redistribución de distritos, dos titulares, Vicente González, demócrata, y Mayra Flores, republicana, luchan en un distrito donde el 88,5% de los votantes son latinos y que se considera pro demócrata. Flores hizo historia como la primera republicana latina electa de la región y la primera congresista nacida en México al ganar una elección especial en junio.

A pesar de que la carrera es más competitiva de lo esperado en un distrito que favorece a los demócratas, González le dijo a NBC News que tiene una fuerte coordinación de campaña por la cual ha logrado recibir visitas a más de 200,000 hogares con más del 60% de los residentes reaccionando positivamente. Según la publicación, "su trabajo de campaña se superpone con el de otras campañas demócratas, como la del candidato a gobernador Beto O'Rourke y la candidata al Senado de Texas Morgan La Mantia, para multiplicar sus fortalezas".

“De los tres republicanos latinos que se postulan, se considera que Monica De La Cruz, respaldada por el expresidente Donald Trump y postulada en un distrito congresional adyacente, el 15 de Texas, tiene la mejor oportunidad de ganar del partido. La legislatura estatal encabezada por el Partido Republicano hizo más republicano el distrito [...]. La demócrata Michelle Vallejo ha estado luchando por apoyo financiero en la carrera contra De La Cruz.

La republicana Cassy García está desafiando al titular de nueve mandatos Henry Cuellar en el Distrito Congresional 28 de Texas, en una contienda que ha sido feroz. Cuellar ha tenido durante mucho tiempo partidarios del Partido Republicano en el área porque es uno de los pocos demócratas que se oponen al aborto y ha apoyado a la Patrulla Fronteriza y a las fuerzas del orden público, trayendo fondos al distrito como miembro del Comité de Asignaciones de la Cámara”.

“En juego en las disputas está el futuro del Valle del Río Grande, una región que durante mucho tiempo ha tenido mayor pobreza, menor ingreso promedio, menor acceso a la educación superior y los ingresos petroleros del estado que la financian, salarios más bajos, más latinos sin seguro médico y una industria más limitada. La economía de la región está creciendo pero, al igual que otras partes del país, se ha desacelerado a medida que suben las tasas de interés, dijo Luis Torres, economista senior de negocios del Banco de la Reserva Federal de Dallas.

Las comunidades en la región fronteriza también dependen en gran medida de la economía de México, desde el turismo hasta el transporte de bienes y servicios.

“Al estar en el sur de Texas, los distritos también se ven afectados por el gasto en inmigración y seguridad fronteriza, aunque la región también tiene condados fuera de la frontera que son más rurales, con economías ligadas a la agricultura”, según la misma publicación.

La mayor atención en la región ha significado gastos multimillonarios en disputas electorales, principalmente de grupos externos. Según los datos de Ad Impact, los republicanos y sus grupos de apoyo y los PAC están gastando más que los demócratas y sus aliados en las tres contiendas hasta el martes.

“La mayor parte del dinero se está gastando en la carrera Cuéllar-García, un total de $9.2 millones, con el Partido Republicano gastando $4.7 millones adicionales sobre los $4.5 millones de los demócratas. Además, los republicanos gastaron $1,2 millones en anuncios en español en las tres contiendas, mientras que los demócratas gastaron $1,7 millones”.