Un grupo encabezado por el conservador Edward Blum, conocido por su victoria legal que puso fin a la acción afirmativa en admisiones universitarias en Estados Unidos, presenta una demanda contra el director del futuro Museo Nacional de América Latina. El motivo de la demanda es un programa de prácticas diseñado para aumentar la representación de hispanos/latinos en puestos directivos en museos. Según la denuncia, el programa de prácticas supuestamente viola la Constitución de los Estados Unidos porque solo contrató internos que se identifican como latinos, excluyendo a los solicitantes no latinos.
Según un informe de NBC News, “Blum anunció la demanda presentada por la Alianza Estadounidense por la Igualdad de Derechos (AAER) en un comunicado de prensa el viernes (23), alegando que el programa viola la Constitución porque 'no está igualmente abierto a los no-latinos'. La demanda nombra a Jorge Zamanillo, director del museo Latino, y a Crosby Kemper, director del Instituto de Servicios de Museos y Bibliotecas del Smithsonian”.
Blum sostiene que considerar la raza y el origen étnico pone en desventaja a los estadounidenses que quieren participar en el programa pero que no cumplen con estos criterios. Afirma que todos los estudiantes interesados en el campo de los estudios museísticos deberían tener la oportunidad de solicitar una pasantía, independientemente de su raza. La declaración de Blum describe reservar la participación basada en razas específicas como injusta e ilegal, y exige el fin de estos programas discriminatorios, según CNNNews.
La demanda de Blum contra el Smithsonian es sólo uno de varios desafíos legales que ha enfrentado recientemente, incluido un caso exitoso ante la Corte Suprema que afectó la acción afirmativa. Además, Blum está involucrado en disputas legales con Fearless Fund, un fondo de capital de riesgo centrado en mujeres negras, y anteriormente ha demandado a bufetes de abogados por sus programas de diversidad, equidad e inclusión, según CNN News.
Estas demandas se producen en el contexto más amplio de los ataques a los programas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI) en los Estados Unidos, lo que genera preocupación sobre el impacto en los esfuerzos por promover lugares de trabajo más inclusivos y equitativos.