La reciente entrevista de la estrella mundial del reguetón Bad Bunny sacó a relucir su lado más emotivo, algo poco común en sus apariciones públicas. Aprovechó la plataforma para hacer un sentido llamado a los votantes puertorriqueños, especialmente a los jóvenes, enfatizando la importancia de votar en las elecciones locales, según NBC News. Durante su conversación con el YouTuber El Tony, Bad Bunny estuvo a punto de llorar al expresar su amor por Puerto Rico y su frustración con la situación política y social de la isla. Destacó que, a pesar de las protestas en las calles, el acto de votar es la mayor protesta que puede realizar la ciudadanía, en referencia a las elecciones previstas para el 5 de noviembre.

Esta entrevista tuvo repercusión en las redes sociales, generando memes y campañas de concientización que incentivan el voto, especialmente entre electores jóvenes y marginados, muchos de los cuales no se registraron para votar. Bad Bunny se dirigió directamente a esta audiencia, afirmando que los jóvenes deben asumir la responsabilidad del futuro de su país y no dejar que otros decidan por ellos, según la publicación.

El impacto de sus palabras ya se ha empezado a sentir. Estudiantes de la Universidad de Puerto Rico, por ejemplo, se movilizaron para registrar nuevos votantes a pesar de las interrupciones en el suministro eléctrico, una realidad constante desde la devastación del huracán María en 2017. Este evento refleja el precario estado de la infraestructura de la isla, otro factor que contribuye al descontento general con el gobierno.

Los comentarios del cantante se produjeron poco después de que la organización Somos Más revelara que el 75% de los jóvenes puertorriqueños menores de 21 años aún no se han registrado a votar, un hecho preocupante en un contexto de creciente desconfianza en las instituciones gubernamentales. Desde 2012, el número de nuevos votantes y la participación en las elecciones han disminuido drásticamente, agravado por las crisis económicas y los desastres naturales. La migración masiva de más de 700.000 puertorriqueños al continente también debilitó la presencia electoral.

Puerto Rico, tradicionalmente polarizado entre dos partidos principales (el Partido Nuevo Progresista, partidario de la estadidad, y el Partido Popular Democrático, a favor del estatus territorial actual), ha visto el surgimiento de nuevas opciones políticas, como el Citizens’ Victory Movement y el Project Dignity. Estos grupos, con ideologías alternativas, reflejan un creciente descontento con los partidos tradicionales.

El llamado de Bad Bunny a un cambio político resuena especialmente entre los jóvenes, que han crecido en medio de la crisis y están más dispuestos a apoyar a candidatos emergentes y nuevos partidos. Reconoce que la reconstrucción de Puerto Rico será lenta, pero destaca que votar es el primer paso imprescindible en este proceso de transformación.