Un ser humano adulto necesita de 7 a 9 horas de sueño por noche. La falta de sueño, ya sea por insomnio u otros problemas, puede causar varios problemas de salud física, como presión arterial alta y diabetes, lo que aumenta las posibilidades de desarrollar enfermedades del corazón.
Una encuesta en Estados Unidos, datos del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades identificaron que 1 de cada 3 latinos duerme menos de 7 horas por noche, muy diferente al promedio estadounidense.
Según un artículo de la American Heart Association investigadores están tratando de aprender por qué, un equipo de investigadores en psicología decidió realizar un estudio sobre los hábitos de sueño de los latinos que viven en el condado de Nogales, Arizona, cerca de la frontera entre Estados Unidos y México. Según el profesor de psicología de la Universidad de Arizona en Tucson, John Ruiz, la investigación tiene como objetivo comprender “cómo los contextos fronterizos y los contextos sociales afectan el sueño en la región”.
Hay varias suposiciones sobre lo que puede perturbar el sueño de este grupo. Entre ellos, se puede considerar el aumento del ruido en regiones con menos infraestructura, además de la inseguridad en cuanto a la protección de la frontera.
Otra consideración es el estatus socioeconómico, aproximadamente el 20% de los residentes del condado de Nogales viven en la pobreza, y el 80% de la población total es latina. Muchos de estos necesitan trabajar en más de un trabajo, comprometiendo las horas de descanso de estas personas.
El estudio se llevó a cabo durante dos semanas. Los participantes se llevaron dispositivos a casa que monitorearían sus patrones de sueño. Otros estudios han señalado que en otras regiones del país, las personas blancas no hispanas duermen mejor y más tiempo que otros grupos raciales o étnicos que viven en la misma región.
La directora sénior de servicios de salud comunitarios del centro e investigadora principal del estudio, Patty Molina, dijo que el objetivo del estudio es comprender el vínculo entre los factores socioambientales y la salud de las personas, y cómo estos problemas "afectan a muchas personas, especialmente aquí, a lo largo de la frontera”, según Heart.
El estudio se detuvo durante la pandemia de COVID-19 y regresó recientemente. Los resultados se pueden utilizar para diferentes aplicaciones en futuras investigaciones dirigidas a la creciente población latina.
Finalmente, John Ruiz afirma, “Comprender la salud de los latinos se convertirá en una prioridad nacional cada vez más importante”, dado su crecimiento en los Estados Unidos y la importancia de garantizar la seguridad de esta población.