Se está discutiendo la propuesta de crear una “visa para el corazón” (“Heartland Visa”), destinado a atraer inmigrantes y empresarios altamente calificados a áreas de los Estados Unidos que enfrentan un declive económico y demográfico. Esta idea ha recibido el apoyo de la “Conferencia de Alcaldes de Estados Unidos”, una organización no partidista de alcaldes y otros funcionarios electos de ciudades con poblaciones de 30.000 habitantes o más. La propuesta tiene como objetivo estimular la innovación, la revitalización y la creación de empleo en comunidades en declive.

El alcalde de Cleveland, Justin Bibb, destacó la importancia de los inmigrantes calificados para la prosperidad y la resiliencia económica de las ciudades. Los alcaldes argumentan que estos inmigrantes pueden ayudar a combatir la desaceleración del crecimiento demográfico, que ha sido una amenaza para el dinamismo económico y la salud financiera de las ciudades.

El Economic Innovation Group (EIG) propuso un programa Heartland Visa en 2019 que requiere doble suscripción: los condados deben optar por participar en el programa y los solicitantes de visas podrán elegir la región participante. Los condados elegibles son aquellos con poblaciones en disminución, crecimiento lento o que alcanzaron su pico de población antes de 1980. Los titulares de visas deben residir en el área elegible durante un período de tiempo específico, pero pueden trabajar de forma remota. El programa sugiere un mínimo anual de 100.000 visas, cada una válida por tres años y renovable por tres años más, con la posibilidad de un camino acelerado hacia la residencia permanente para personas con altos ingresos.

La propuesta de visa basada en la ubicación ha recibido apoyo bipartidista. Las encuestas indican que aproximadamente tres cuartas partes de los votantes apoyarían la idea de permitir que las ciudades en dificultades recluten inmigrantes altamente calificados. Además, gobernadores republicanos como Eric Holcomb de Indiana y Spencer Cox de Utah han abogado por visas patrocinadas por los estados como una solución a la crisis migratoria nacional, permitiendo a los estados atraer nuevos residentes para satisfacer las necesidades de sus comunidades.