El expresidente Donald Trump participó en un debate organizado por Univisión para cortejar el voto latino, un grupo demográfico crucial para las elecciones, especialmente en estados indecisos como Arizona y Nevada. Trump destacó su historial económico y dijo que los latinos estuvieron mejor durante su mandato. Mencionó que proporcionó empleos, incluso en su campo de golf en Florida, para atraer audiencias de habla hispana.
Sin embargo, el evento estuvo marcado por preguntas sobre la inmigración. Cuando un granjero de California le preguntó quién haría el trabajo agrícola si deportara a millones de inmigrantes indocumentados, Trump desvió la pregunta hacia los delitos cometidos por inmigrantes indocumentados y reiteró la importancia de que los trabajadores ingresen al país legalmente y amen a los Estados Unidos, según un artículo de NPR. También hizo afirmaciones falsas sobre la administración Biden, diciendo que había liberado a criminales peligrosos en Estados Unidos.
También según la publicación, Trump fue presionado por un proyecto de ley fronterizo bipartidista que fracasó después de su supuesta intervención y por afirmaciones sin fundamento de que los inmigrantes haitianos en Ohio estaban comiendo perros y gatos. Se defendió afirmando que sólo estaba repitiendo lo informado.
Pese a las dudas de parte del electorado latino, Trump ha aumentado su apoyo entre este grupo, principalmente por su mensaje económico. Sin embargo, todavía enfrenta críticas, como la de un republicano que mencionó su preocupación por las invasiones del 6 de enero y quiso saber cómo pretendía Trump recuperar su voto. Trump defendió el ataque al Capitolio, calificándolo de “día del amor” y afirmando que la gente estaba protestando por las elecciones.
El hecho se produjo poco después de un debate
similar con la vicepresidenta Kamala Harris. Aunque los demócratas
tradicionalmente tienen una ventaja entre los votantes latinos, las encuestas
muestran que Trump ha logrado cerrar esa brecha, haciendo la carrera más
reñida.