Sylvia Méndez (nacida el 7 de junio de 1936 en Santa Ana, California, EE. UU.) es una activista estadounidense de derechos civiles que desafió la segregación escolar a mediados del siglo XX. Nacida de padres mexicanos y puertorriqueños, a Sylvia se le prohibió inscribirse en una escuela primaria cerca de su casa en Westminster, California, debido a su ascendencia hispana. En cambio, ella y sus hermanos fueron enviados a una escuela segregada para niños mexicano-estadounidenses.
Decidido a luchar contra esta injusticia, el padre de Sylvia, Gonzalo Méndez, contrató al abogado de derechos civiles David Marcus e inició acciones legales contra el Distrito Escolar de Westminster y otros tres distritos del Condado de Orange. El caso, conocido como Méndez v. Westminster, argumentó que la segregación escolar basada en el origen étnico violaba la cláusula de protección igualitaria de la Decimocuarta Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos.
En un fallo histórico de 1946, el tribunal federal falló a favor de Méndez y ordenó el fin de la segregación en las escuelas. Esta victoria influyó en el histórico caso de la Corte Suprema de 1954, Brown v. Junta de Educación, que declaró inconstitucional la segregación racial en las escuelas públicas.
Después del caso, Sylvia Méndez continuó su educación y se convirtió en enfermera, trabajando durante más de 30 años en el Centro Médico de la Universidad del Sur de California. Más tarde dedicó su tiempo a educar a otros sobre su caso legal y, en 2011, recibió la Medalla Presidencial de la Libertad de manos del presidente Barack Obama por su trabajo en defensa de los derechos civiles.
La historia de Sylvia Méndez destaca su papel crucial en la lucha por la igualdad racial y el acceso a la educación en los Estados Unidos, así como su impacto duradero en la jurisprudencia de derechos civiles.