El año 2024 será el año electoral más importantede la historia. En todo el mundo, más de 2 mil millones de votantes en 50 países acudirán a las urnas, según el Center for American Progress, un instituto político independiente y no partidista en los Estados Unidos. Estados Unidos, India y México se encuentran entre los casi ochenta países que representan poco más de la mitad de la población mundial que celebrarán elecciones nacionales en 2024. Nunca en la historia un número tan grande de personas en todo el mundo había votado en el mismo año.
Según la publicación de World Economic Forum, más de 160 millones de personas en EE.UU. están registradas para votar por el 60º presidente que ocupará la Casa Blanca durante cuatro años, a partir de enero de 2025. El actual presidente Joe Biden espera conseguir un segundo mandato , mientras que el expresidente Donald Trump espera regresar al poder. El próximo presidente podría ayudar a definir el futuro de varios conflictos en el mundo, como las guerras en Ucrania y Gaza, además de solidificar el papel del país en sus relaciones con países aliados y adversarios, como China y Rusia. Además, podrá orientar cuestiones que son claramente importantes a nivel interno, como la economía y la inmigración, y para la humanidad, como la crisis climática y las disputas geopolíticas.
En este sentido, una nueva encuesta de USA Today y la Suffolk University, realizado entre el 26 y 29 de diciembre del año pasado, reveló que el expresidente Trump aventaja al presidente Biden en la disputa electoral de este año entre grupos demográficos que antes eran mayoritarios en la base demócrata, como los votantes latinos/hispanos y entre la población joven.
La incapacidad de Biden para solidificar el apoyo de segmentos críticos de la amplia coalición que lo eligió en 2020 resultó, como muestran las encuestas, en una estrecha desventaja para Trump. En una comparación directa, Trump aventaja con un 39% frente al 37% de Biden, y un 17% expresa su apoyo a un candidato de un tercer partido no identificado. Cuando se especifican siete candidatos por su nombre, la ventaja de Trump se extiende a 3 puntos porcentuales, con el independiente Robert F. Kennedy Jr. emergiendo como el tercer candidato líder, con un 10%, según la encuesta antes mencionada.
Ante los datos presentados, se hace más evidente el gran desafío político que enfrenta Biden para asegurar un segundo mandato. Según los investigadores, aunque algunos entrevistados reconocieron el trabajo razonablemente sólido de Biden, un aspecto subjetivo fue evidente entre algunos demócratas entrevistados: el sentimiento de decepción por tener “dos viejos blancos” en la carrera.
Otras referencias están relacionadas con la población negra estadounidense. Según el comunicado de la encuesta, “el apoyo a Biden ha disminuido significativamente entre los votantes negros, pasando del 87% en 2020 al 63% ahora, según el Roper Center. También está a 5 puntos porcentuales entre los votantes hispanos, una disminución notable con respecto a su ventaja de 2 a 1 sobre Trump en 2020. Entre los votantes menores de 35 años, donde Biden lideraba en 2020, Trump ahora lidera con un 37 % a un 33 %”.
También según la publicación de USA Today, el posible lado positivo para Biden, revelado por la encuesta, es que gran parte del apoyo que perdió parece haber sido transferido a candidatos de terceros partidos, en lugar de directamente a Trump. Aproximadamente el 20% de los votantes hispanos y negros, y el 21% de los votantes jóvenes, expresan su inclinación a apoyar a alguien que no sea los dos candidatos principales. El apoyo a Trump entre los votantes negros se mantiene en el 12%, el mismo que en 2020. Sin embargo, la encuesta indica que uno de cada cinco votantes negros está considerando apoyar a un candidato de un tercer partido en las próximas elecciones de noviembre.
Una cuestión preponderante destacada por los investigadores respecto a los desafíos que enfrenta el actual presidente es la gran dificultad que viene enfrentando Biden para aumentar el entusiasmo entre sus seguidores, a diferencia de Trump, quien viene manteniendo mayores niveles de entusiasmo entre su base. En este sentido, la percepción de una mejora económica en el país entre la población, revelada por la investigación, puede comenzar a cambiar esta situación. Sin embargo, todavía es demasiado pronto para que esta percepción positiva se traduzca en un mayor apoyo al actual presidente.
En relación a Donald Trump, se destaca su fuerte posición en la disputa por la nominación del Partido Republicano, con el apoyo del 62% de los probables votantes republicanos en las primarias. Los desafíos legales y las controversias del expresidente no han afectado significativamente su apoyo político. Precisamente lo contrario que el bando demócrata, ya que la candidatura de Biden se está viendo afectada por una posible erosión de su base de apoyo.
El presidente enfrenta desafíos como la insatisfacción con la inflación, la preocupación por la frontera y la falta de entusiasmo por sus logros políticos. Según una publicación de la plataforma Semafor America basada en entrevistas con destacados líderes hispanos del país, el voto hispano está continuamente en juego, y Trump estrecha los márgenes, especialmente en estados indecisos como Arizona, Nevada y Wisconsin. Estos líderes representan organizaciones como League of United Latin American Citizens (LULAC), United States Hispanic Business Council (USHBC), Hispanic Chamber of E-Commerce e Florida State Hispanic Chamber of Commerce (FSHCC), que dan seguimiento a las principales dificultades que la comunidad hispana ha enfrentado en los últimos años y que pueden estar influyendo directamente en la pérdida de apoyo de los demócratas entre este electorado.
Según estos dirigentes, aunque existe temor a una segunda presidencia de Trump y la preocupación por las deportaciones son factores que aún favorecen a Biden entre los hispanos (especialmente las mujeres), falta un mensaje central atractivo para este electorado, preocupado por las cuestiones económicas, como la inflación y el costo de vida. Las críticas todavía se dirigen a la narrativa de la administración “Bidenomics”, y los líderes empresariales hispanos argumentan que no refleja las experiencias reales de las comunidades. También destacaron la necesidad de afrontar cuestiones de costo de vida, vivienda y seguridad pública para ganar el apoyo de los votantes hispanos.
La falta de un discurso atractivo, enfático, que una los intereses y necesidades más urgentes de esta población se destaca como un desafío que la administración Biden debe superar. En contraste, se describe al Partido Republicano como más agresivo en la búsqueda de candidatos hispanos, desafiando los bastiones demócratas y trabajando para aumentar sus puntajes en áreas conservadoras. Se considera que la campaña de Trump se centra en la economía, algo que la campaña de Biden debe abordar para revertir la tendencia al repliegue, según los líderes latinos entrevistados.
Aún en el contexto de medir el pulso de la opinión pública latina respecto a las elecciones presidenciales de 2024, se presentó la “Encuesta Anual de Opinión Pública Hispana” (Annual Hispanic Public Opinion Survey) patrocinado por “Adsmovil” y publicado en el sitio web de Florida International University (FIU), a través del Latino Public Opinion Forum (LPOF), establecido por el Instituto de Políticas Públicas Jack D. Gordon de FIU, presentó datos relevantes. La recopilación de datos se llevó a cabo entre el 18 de noviembre y el 3 de diciembre de 2023, involucrando a 1,221 encuestados seleccionados al azar de los 22 estados de EE. UU. con mayor concentración hispana. El tamaño de la muestra tiene un margen de error del 2,8%. El rango de edad predominante de los encuestados es entre 35-44 años (26,4%) y 25-34 (2,6%) se declararon mujeres (49,4%) y hombres (50,0%), entre otras características presentadas en el informe.
La encuesta encontró que, como hispano/latino, los “demócratas” representan mejor sus valores (58,4%) en comparación con los “republicanos” (24,1%). El 12,9% de la muestra respondió que “ninguno de los partidos” lo representa y el 4,6% no supo o no quiso responder. Cuando se les preguntó si consideraron cambiar de partido el año pasado, el 71,4% respondió “no”, el 19,4% “sí”, pensó en la posibilidad y el 9,2% no sabía o no quiso opinar. Respecto al tema del voto y la posibilidad de acudir a las urnas en las próximas elecciones presidenciales, el 73,8% respondió “muy probable” además de un 15,8% que respondió “probablemente” frente a un 7,1% que respondió como “improbable” y un 3,2% “ muy improbable” que emitan su voto.
Otra pregunta importante de la encuesta relacionada con la reelección de Joe Biden como presidente estuvo dirigida a si su trabajo fue aprobado o no. En respuesta, el 25% de los latinos dijo que “aprueba” su trabajo, el 20,2% “no lo aprueba, pero no lo desaprueba” y el 18,8% lo “aprueba firmemente”. Por otro lado, un 19,6% “desaprueba firmemente” y un 15,2% “desaprueba” el trabajo del actual presidente. Quienes no saben o no quisieron responder corresponden al 1,2% de los entrevistados.
En cuanto a la “inclinación” del electorado encuestado por USA Today y Suffolk a apoyar a alguien que no sea los dos principales candidatos, encontró resonancia en la encuesta realizada únicamente por FIU. Según el informe, cuando se les preguntó si Biden debería postularse en 2024, el 44,7% respondió “no”, el 34,6% respondió “sí”, el 17,8% dijo “no estoy seguro” y el 7,9% “no sabe o no respondió”. Se hizo la misma pregunta en relación con Donald Trump y el 57,2% respondió que “no” debería postularse en 2024, el 32,2% dijo “sí”, que debería postularse, el 8,7% dijo “no estoy seguro” y el 1,9% “no sé” o no respondió. Si las elecciones presidenciales se celebraran hoy, el 53,4% de los hispanos votaría por “Joe Biden” frente al 33,2% que votaría por “Donald Trump”.
Es interesante señalar que la encuesta reveló que el 17,3% de los entrevistados no supieron identificar cuál sería la principal amenaza a la seguridad nacional. Por otro lado, el 11,5% de ellos respondió que se trata de fronteras abiertas/inmigrantes descontrolados, lo que favorece las políticas antiinmigración de Trump. Terrorismo (externo)/Oriente Medio; Hamás; los islamistas figuran como la principal amenaza para el 10,2% de los encuestados, seguidos por el 9,6% que considera que las guerras en curso entre países con participación de Estados Unidos son la principal amenaza para el país. Entre los principales problemas que enfrenta, confirmando los informes de los principales líderes de organizaciones hispanas en EE.UU. y otrasencuestas de opinión, los principales problemas que enfrenta el país hoy, según la comunidad latina entrevistada, sería la inflación/precios altos/costo de vida (19,8%), la economía/pobreza (16,6%), la inmigración: control fronterizo/seguridad (7,5%), seguido del el tema guerra/manejo de conflictos internacionales/política exterior para el 4,7% de los encuestados.
Otra encuesta que buscaba revelar insights importantes sobre la opinión de los votantes hispanos en los Estados Unidos, centrándose en estados clave como Arizona, Florida, Nevada y el Valle del Río Grande, Texas, fue realizada entre el 6 y el 12 de noviembre de 2023 por Cygnal (la empresa encuestadora privada de más opinión precisa y de mayor crecimiento en el país). Entre las principales conclusiones destaca la valoración del gobierno de Joe Biden: el 62% de los votantes hispanos cree que el país va por el “camino equivocado”, frente al 32% que entiende lo contrario. La prioridad para los votantes hispanos, según la encuesta, es “la inflación y la economía” (36% en general), que emerge como el tema principal para al menos un tercio de los votantes hispanos en cada estado encuestado. Los votantes hispanos en los cuatro estados encuestados tienden a ver a la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos “favorablemente” (53%) frente al 33% que la ve “desfavorablemente”. Otro 14% “no expresó opinión”. El 63% de los votantes hispanos cree que el “sueño americano” es “alcanzable” para ellos personalmente, en contraste con el 31% que respondió que es una meta “inalcanzable”.
Diferentemente do que acreditavam alguns analistas democratas, o aumento da população latina nos EUA não se traduziu necessariamente em ganhos substanciais para o Partido Democrata, pois a demografia por si só não determina os resultados políticos. A crise iniciada em 2007 teve um impacto significativo nos diversos setores da sociedade estadunidense e, principalmente, na organização da política, levando a uma reorganização de prioridades e à emergência e adesão ao conservadorismo político e à extrema direita. A recessão econômica contribuiu para a ascensão de alguns movimentos nesse sentido e o cenário político testemunhou a ascensão de Donald Trump. Em contrapartida, alguns movimentos progressistas e da esquerda estadunidense em prol dos direitos civis ganharam corpo, exemplificada pelo surgimento doA complexidade da política estadunidense destaca-se hoje pela multiplicidade de correntes políticas e culturais que tornam difícil prever os resultados eleitorais. Um aspecto crucial discutido no texto é a atitude dos eleitores latinos. Notavelmente, o que se destaca é o aumento do favoritismo de Donald Trump frente a Joe Biden. Para os observadores da política dos Estados Unidos, 2024 será um ano repleto de movimentações. O Latino Observatory irá acompanhar de perto os principais eventos da corrida eleitoral.
Según el informe, “a menos de un año de las elecciones de 2024, los votantes hispanos están abiertos al Partido Republicano y a Trump: el 41% votaría por Trump sobre Biden en una revancha de 2020, y el 43% votaría por alguien que no sea Trump del Partido Republicano. Trump lidera entre los cubanoamericanos entre un 58% y un 35%, mientras que Biden tiene una ventaja de entre un 54% y un 35% entre los mexicano-estadounidenses. La imagen neta [net image] de Biden (-27) es peor entre los independientes hispanos en general que la de Trump (-15)”.
Los datos reflejan la complejidad de las preferencias de los votantes hispanos, con especial atención en las preocupaciones económicas y las percepciones de la administración Biden. A pesar de las dificultades actuales, el equipo de Biden afirma no subestimar a los votantes hispanos, invirtiendo en publicidad y programas dirigidos a estegrupo. El énfasis en la oposición a una segunda presidencia de Trump se considera un punto de encuentro, ya que la campaña espera desmitificar las encuestas que sugieren una pérdida de apoyo entre los latinos.
Contrariamente a lo que creían algunos analistas demócratas, el aumento de la población latina en Estados Unidos no se tradujo necesariamente en avances sustanciales para el Partido Demócrata, ya que la demografía por sí sola no determina los resultados políticos. La crisis iniciada en 2007 tuvo un impacto significativo en diferentes sectores de la sociedad estadounidense y, principalmente, en la organización de la política, provocando una reorganización de prioridades y el surgimiento y adhesión del conservadurismo político y la extrema derecha. La recesión económica contribuyó al surgimiento de algunos movimientos en esta dirección y el escenario político asistió al ascenso de Donald Trump. Por otro lado, algunos movimientos progresistas y de izquierda en Estados Unidos a favor de los derechos civiles cobraron impulso, ejemplificado por el surgimiento de Black Lives Matter en 2013 y la cuestión de los derechos reproductivos, que pasó a primer plano después de que la Corte Suprema anuló la decisión de Roe v. Wade, en junio de 2022.
La complejidad de la política estadounidense se
pone de relieve hoy por la multiplicidad de corrientes políticas y culturales
que dificultan la predicción de los resultados electorales. Un aspecto crucial
que se discute en el texto es la actitud de los votantes latinos. Cabe destacar
el aumento del favoritismo de Donald Trump sobre Joe Biden. Para los
observadores de la política estadounidense, 2024 será un año lleno de
movimiento. El Latino Observatory seguirá de cerca los principales
acontecimientos de la carrera electoral.